La moral se define en Larousse como el “conjunto de reglas de conducta, consideradas como absolutamente buenas o derivadas de una cierta concepción de la vida”. La educación moral se trata de transmitir la enseñanza de estas reglas de conducta a nuestros hijos para que puedan aplicarlas en su vida diaria. La importancia de la educación moral es observable en el hecho de que sin principios, sin reglas de conducta, la vida en sociedad se vuelve imposible. Para vivir en una comunidad, todos deben respetar los principios morales, independientemente de su afiliación religiosa. Al respetar estas reglas de conducta como respeto por los demás, la vida en sociedad es posible. Por lo tanto, debemos dar esta educación moral a nuestros hijos, basada en las reglas de conducta contenidas en la práctica de nuestra religión.
Hagamos que nuestros hijos sean sinceros
Los niños por naturaleza siguen lo que sus padres les enseñan. Por lo tanto, la enseñanza de la buena moral, los valores propios del Islam serán beneficiosos para el niño. Las reglas de conducta y su moral en el Islam son muy numerosas. No podremos exponerlos a todos. Entre estos valores, enseñar sinceridad a nuestros hijos es primordial.
La crisis de la educación cívica y moral hoy
La modernidad promueve la educación y generaliza la educación escolar, pero al mismo tiempo, paradójicamente, a través del desarrollo de la democracia (en el sentido no solo del régimen político sino también de una profunda transformación de la sociedad y la sociedad). Cultura), pone en crisis la educación y la escuela. Algunos discursos de igualitarismo democrático tienden a borrar la diferencia entre el niño y el adulto y socavan la autoridad de los padres y maestros. La democracia moderna también socava algunos aspectos de la transmisión, especialmente la continuidad entre generaciones y la presencia viva del pasado. Dirigido hacia el futuro, es impulsado por el deseo de emancipación. tiene una actitud hacia el pasado y la tradición que es al mismo tiempo distante, de rechazo en sí mismo, La democracia se ha construido contra la autoridad de la religión y la tradición y las formas tradicionales de educación. Contra: alejándose pero también confiando en ellos. Pero no es tanto la modernidad como tal lo que hace imposible la educación que ciertas figuras de la modernidad, las que se llaman posmodernas. Por postmodernidad entendemos no una postmodernidad sino una radicalización de la crisis de la modernidad. ¿Cómo tiende la posmodernidad a hacer imposible la educación? La personalidad moderna se caracteriza por la internalización de las normas colectivas, es decir, una apropiación consciente y voluntaria de lo que, en la sociedad tradicional, se recibió por incorporación. “El deber es lo que me impone a mí como a todos, pero, no obstante, debo desear individualmente en conciencia”